Las comunidades rurales están experimentando un auge en el desarrollo de energías renovables. Ya sea energía eólica o solar, las comunidades se benefician de mayores ingresos fiscales, creación de nuevos empleos y pagos de alquileres locales. Mejor aún, las comunidades pueden acceder a beneficios adicionales a través de Acuerdos de Beneficios Comunitarios (CBA).
Un CBA es un acuerdo específico para un proyecto entre los desarrolladores de energía renovable y los grupos comunitarios locales que describe una serie de beneficios específicos que proporcionará el desarrollador. Los CBA no son iguales para todos y pueden personalizarse para satisfacer las necesidades particulares de cada comunidad.
Entre los tipos de beneficios más comunes se encuentran los fondos de beneficio comunitario, una donación financiera anual o única a una junta local que distribuye los fondos en toda la comunidad, y las inversiones directas, una contribución financiera a programas locales como un programa de capacitación laboral local. Otros tipos de posibles beneficios incluyen disposiciones laborales, contribuciones a subvenciones locales y donaciones a servicios de emergencia y escuelas.
Por ejemplo, un desarrollador comprometió $250 por megavatio para un proyecto de 160 megavatios a un fondo de beneficio comunitario, lo que totalizó $40,000 anuales para que la comunidad los usara en varios proyectos locales.
Los acuerdos de colaboración permiten a los residentes dar forma al desarrollo local de la energía renovable al cambiar el equilibrio de poder de los desarrolladores a la comunidad. Los acuerdos promueven la colaboración para garantizar que los proyectos proporcionen contribuciones significativas a toda la comunidad, más allá de los pagos de arrendamiento típicos a los propietarios de tierras y los ingresos fiscales. Las comunidades rurales se benefician enormemente de este proceso, ya que cada una tiene necesidades y prioridades únicas que los acuerdos de colaboración pueden abordar a través de soluciones personalizadas.
Un elemento clave para aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece un acuerdo de asociación comunitaria es la participación directa de la comunidad. La participación temprana y frecuente de las partes interesadas de la comunidad garantiza que se pueda abordar una amplia gama de puntos de vista y necesidades. A medida que el desarrollo de la energía renovable continúa creciendo en las zonas rurales, los acuerdos de asociación comunitaria permiten a los residentes maximizar los beneficios para sus comunidades y tener una voz significativa en el proceso de toma de decisiones.
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