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Ante el cambio climático, los productores deben tener acceso a herramientas de gestión de riesgos, como el seguro de cultivos para protegerse de las condiciones meteorológicas impredecibles. En 2023, los productores de Nebraska, Iowa, Minnesota, Dakota del Sur y Kansas sufrieron pérdidas por un total de más de $7 mil millones de dólares debido a desastres climáticos y condiciones meteorológicas extremas. De estos, aproximadamente el 60% estaban asegurados.1
El seguro federal de cultivos, administrado por la Agencia de Administración de Riesgos (RMA) del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, brinda protección para los agricultores y ganaderos que enfrentan pérdidas de rendimiento o ingresos por causas naturales o fluctuaciones del mercado. Este folleto describe los riesgos más comunes cubiertos por el seguro de cultivos y cómo afectan a los agricultores.